Abarth 500 500C (2010) | Impresiones del interior

17/09/2010 |Jorge Fernández

La capota, de accionamiento totalmente eléctrico, se acciona con suma rapidez y facilidad desde un botón situado en el centro del marco del parabrisas, justo al lado del plafón de iluminación. Puede dejarse en cualquier punto intermedio o plegarla por completo (más información).

El alerón está integrado en la capota. Éste, a su vez, tiene colocada en su parte central la tercera luz de freno que queda visible en todo momento —independientemente de la posición en la que se encuentre la capota—.

El puesto de conducción y prácticamente idéntico al del Abarth 500 y tiene pocas posibilidades de regulación. El volante solamente tiene regulación en altura y va muy pegado al salpicadero. En mi caso, que conduzco con el respaldo casi perpendicular al suelo, el volante me queda muy lejos si me coloco respecto a los pedales como lo haría normalmente. Esta sensación no parece aislada pues la hemos tenido varias personas de km77.com todas ellas de diferente estatura

Los asientos llevan los reposacabezas integrados. La unidad que pude conducir tenía los asientos tapizados en cuero (1.000 €). Dan buena sujeción, sobre todo a la altura de la zona lumbar, aunque tienen una anchura de respaldo un tanto estrecha y los conductores que tengan una espalda ancha irán apoyados sobre los resaltos laterales en vez de entre ellos. La tapicería de cuero traspira poco.

La parte baja de la consola puede molestar en determinadas ocasiones —por ejemplo, al circular rápido por tramos de curvas— porque la forma que tiene hace que la rodilla quede apoyada constantemente contra ella y, al hacerlo, puede resultar molesta debido al material del que está cubierta —plástico duro—.

Las plazas posteriores son poco aprovechables. Una persona de más de 1,75 m de estatura, si se sienta con la espalda completamente apoyada en el respaldo, roza su cabeza con el techo. El espacio disponible para las piernas y la anchura a la altura de los hombros es normal en un vehículo de su tamaño (tabla comparativa) y suficiente para dos personas.

La instrumentación es idéntica a la del Abarth 500. Tiene un indicador denominado GSI («Gear Shift Indicador») que recomienda al conductor el momento óptimo para subir o bajar una velocidad. Tiene dos modos de funcionamiento, uno para conseguir un consumo de carburante bajo y otro, una aceleración alta.

El maletero es pequeño. Tiene una capacidad de 185 litros, lo mismo que la versión con carrocería cerrada, aunque es menos funcional porque no tiene portón si no que se accede a él a través de una pequeña tapa.