Opel ha presentado en el Salón de Essen 2002 un prototipo llamado Corsa OPC. Según la respuesta que detecte, decidirá fabricarlo en serie y ponerlo a la venta, como ya hizo con el Astra y el Zafira.

El Corsa OPC (Opel Performance Cars) tiene un motor turboalimentado de 1,6 litros de cilindrada y 175 CV de potencia. Opel no cita el régimen de potencia máxima, pero debe ser necesariamente superior a 5.900 rpm, un régimen más bien alto para un motor turboalimentado.

El par máximo es 210 Nm (Opel tampoco dice el régimen), lo que quiere decir que la presión media que puede haber en los cilindros de este motor es tirando a alta. Es mayor, por ejemplo, que la de motores como el 1.8 T de Audi en versión de 163 CV o que el 2.0 T de Saab en versión de 185 CV. Es la misma presión que alcanza el Mini Cooper S, que tiene también un motor de 1,6 litros sobrealimentado, pero con un compresor volumétrico en lugar de un turbocompresor.

Las prestaciones que declara Opel para este prototipo son 225 km/h de velocidad máxima y 7,9 s en aceleración de 0 a 100 km/h. Llama la atención lo rápido que es en velocidad punta: en Mini Cooper S hace 218 km/h y un Peugeot 206 RC y Renault Clio Sport, 220 km/h. En aceleración, en cambio, es más lento que los tres modelos citados.

Los cambios de bastidor son los normales en coches de este tipo: muelles más duros, carrocería más baja (25 mm, en este caso), amortiguadores adaptados a los muelles y ruedas grandes (con llantas de 17”).

Los cambios externos con relación a otros Corsa afectan principalmente a los dos paragolpes, estribos, aletines, retrovisores y alerón trasero. Interiormente se distingue sobre todo por los asientos (de tipo deportivo y tapizados de Alcantara azul), los cinturones de seguridad, el salpicadero y los paneles de las puertas (con algunos remates metálicos).