Mercedes-Benz CLA Shooting Brake (2015) | Impresiones del interior

17/08/2015 |Pablo David González (@PD_Gonzalez) y Enrique Calle (@QuiqueCalle)

El Mercedes-Benz CLA Shooting Brake no es un familiar amplio. De entre todos los familiares comparables que hemos medido, ocupa la última posición por espacio para las piernas y anchura entre puertas, y es de los que menos espacio deja para que la cabeza no dé en el techo (tabla comparativa de mediciones interiores). Además de ser pequeño, el habitáculo no da mucha sensación de espacio porque las ventanillas son pequeñas y porque los arcos laterales del techo quedan cerca de la cabeza de los ocupantes. Un Mercedes-Benz Clase C Estate y un BMW Serie 3 Touring son preferibles para aquellos que quieran un coche que no solo sea más espacioso, sino que además también dé la sensación de serlo.

En cualquier caso, es más cómodo de utilizar que el CLA Coupé por dos motivos: primero, porque en las plazas traseras hay seis centímetros más de altura libre al techo y, segundo, porque el maletero es de mayor tamaño y fácil de cargar. 

Los seis centímetros adicionales en la fila posterior son fundamentales para que puedan viajar ocupantes de estatura superior a 1,80 metros sin que su cabeza roce con el techo. Caben personas de hasta 1,85 metros, si bien esta estatura de referencia puede variar en función de lo erguido o tendido que se siente cada uno. La anchura entre puertas y el espacio para las piernas es similar en los dos. 

La plaza central es poco aprovechable porque es estrecha y porque si ahí se sienta alguien compromete la comodidad de los otros dos, dado que la anchura disponible entre puertas no es grande. De hecho, Mercedes-Benz dice que el asiento posterior tiene configuración 2+1. Los asientos laterales llevan los reposacabezas integrados en los respaldos (imagen), pero es posible que sean una pieza independiente si se elige la línea de equipamiento Urban.

El acceso a las plazas posteriores es más cómodo en el CLA Shooting Brake que en el CLA Coupé porque la caída que describe el techo es menos pronunciada, pero es más incómoda que en otros familiares, como los mencionados Serie 3 Touring y el Clase C Estate.

El maletero tiene 495 litros de capacidad, que son 25 más de los que tiene el CLA Coupé. Queda muy lejos de coches como el Honda Civic Tourer (624 litros), el SKODA Octavia Combi (610 litros) y el Volkswagen Golf Variant (605 litros), pero está cerca del nuevo Audi A4 Avant (505 litros), es idéntico al del BMW Serie 3 Touring y es un poco más grande que el del Clase C Estate (490 litros). El portón tiene apertura manual, aunque en opción hay disponible un sistema de apertura y cierre automático (llamado EASY-PACK, cuesta 519,09 €).

El piso del maletero forma un plano de 95 centímetros de profundidad y 104 de anchura; la altura hasta la cortinilla es 44 cm (en un Clase C Estate estas medidas son 97, 94 y 42 centímetros respectivamente). Entre el extremo exterior del parachoques trasero y el comienzo del maletero hay 25 centímetros de separación. Además, el marco inferior del maletero forma un escalón de 16 centímetros de altura con el piso. Ambas cosas dificultan introducir objetos pesados o llegar a los menudos que estén pegados a los respaldos de las plazas posteriores. Hay distintos elementos para organizar y mantener la carga sujeta, como ganchos en los laterales para colgar bolsas, argollas y una red en uno de sus laterales. 

Bajo el hueco principal del maletero queda un sitio que permite guardar en él objetos como unas botas, un botiquín, los triángulos y las herramientas para reparar un pinchazo (imagen). El CLA Shooting Brake no lleva rueda de repuesto, sino un sistema de reparación de pinchazos, o bien, unos neumáticos de tipo RunFlat, que permiten circular durante unos 80 km a 80 km/h con las ruedas sin presión gracias a que tienen unos flancos más rígidos. Si se pide el sistema de sonido más avanzado (llamado «Harman Kardon Logic 7», cuesta 811 €) este hueco queda ocupado parcialmente por el amplificador.

En el CLA Shooting Brake hay dos formas de ampliar el espacio de carga. La primera es colocar los respaldos traseros en una posición más cerca de la vertical (no tenemos una imagen, pero se consigue mediante una solución similar a la que emplea Renault en el Twingo; imagen). En esta posición es posible transportar a personas, pero con una disminución del confort muy importante, ya que la postura que deben adoptar es muy incómoda.

La segunda forma es abatir completamente los respaldos (divididos en dos partes; 1/3 y 2/3), que quedan enrasados con la superficie del maletero, aunque la superficie que resulta no es perfectamente horizontal (imagen). Con los asientos en esta posición, el volumen de carga es 1354 litros y, si se desplaza lo más adelante posible el asiento del pasajero, se pueden transportar objetos de unos 190 cm de longitud.

Es espacio de carga por encima de la línea de las ventanillas no es tan aprovechable con en otros familiares, pues el techo y el portón están muy tendidos. Además, no existe la posibilidad de separar el maletero del habitáculo con una red ya que la cara interior del techo no tiene fijaciones para tal fin.

La unidad que hemos probado tenía el sistema multimedia opcional denominado «Audio 20 CD con preinstalación para navegador Garmin MAP PILOT» (484 €), el sistema de navegación «Garmin MAP PILOT» (611,05 €) y la pantalla central de 8,0 pulgadas (182,71 €; la de serie tiene 7,0 pulgadas). El sistema multimedia se maneja con una ruleta y un par de botones que hay entre los dos asientos delanteros (imagen), ya que la pantalla no es táctil. Pasado un breve periodo de aprendizaje, su uso resulta rápido y distrae poco. La información que muestra la pantalla se ve bien con independencia de cómo incida la luz del sol sobre ella, a pesar de que está colocada en lo alto de la consola y no tiene ningún tipo de protección que le de sombra. Lo que menos me ha gustado de ella es su unión con la consola, porque parece endeble y al pasar sobre algunos baches produce ruidos.

Los gráficos de los menús y de los mapas del navegador Garmin MAP PILOT resultan chocantes al principio porque no siguen el mismo patrón de diseño del resto de funciones del sistema multimedia. Las direcciones se pueden introducir manualmente utilizando la ruleta central, o bien, mediante el sistema de reconocimiento de voz. Esta última vía es mucho más rápida, ya que el sistema suele interpretar correctamente las direcciones que se dictan. El cálculo de la ruta es lento, pero una vez cargada el sistema da un guiado correcto.