Land Rover DC100 y DC100 Sport prototipo (2011) | Información general

15/09/2011 |Jaime Arruz

Los Land Rover DC100 y DC100 Sport son dos prototipos que anticipan el aspecto y algunas de las características de la próxima generación del Defender, que comenzará a fabricarse en 2015. El modelo de producción reemplazará al Defender que comenzó a comercializarse en 2007 y que está disponible desde 30 350 € (todos los precios).

Ambos prototipos tienen carrocería de todoterreno, una cerrada (DC100) y otra descapotable (DC100 Sport). Este último tiene techo de material textil y parabrisas abatible. Los dos tienen tres asientos en la parte delantera, el central de menor tamaño que los otros dos (imagen). Bajo su banqueta hay un hueco para dejar objetos.

El aspecto del DC100 tiene poco que ver con el del actual Defender (imagen), cuyo diseño permanece prácticamente inalterado desde que comenzó a venderse en 1948. Según Land Rover, este prototipo no está basado en el coche de producción, como algunos otros prototipos que las marcas presentan, sino que «significa el comienzo de un viaje de cuatro años para diseñar el nuevo Defender».


Mantiene ciertas características que facilitan su conducción fuera del asfalto, que es el terreno natural del Defender, como la tracción total, una buena distancia libre al suelo y neumáticos de campo. El DC100 tiene una suspensión neumática que permite modificar la altura de la carrocería en hasta 32 centímetros. Mientras, el DC100 Sport lleva suspensión de dureza variable («Magneride»), con unos amortiguadores que tienen un fluido cuya viscosidad cambia cuando se le aplica un campo magnético.

Los dos prototipos llevan un motor de 2,0 litros y cuatro cilindros, de gasolina en el caso del DC100 Sport y Diesel en el del DC100. Van asociados a una caja de cambios automática de ocho velocidades desarrollada por el especialista ZF. Según Land Rover, ambos están diseñados para sistemas de propulsión híbridos o híbridos enchufables. Llevan un sistema de parada y arranque automático del motor («Stop/Start») en las detenciones para que el consumo sea el mínimo posible.

El DC100 y el DC100 Sport tienen un sistema, denominado «Driveline Disconnect», que desacopla el eje trasero para reducir el consumo siempre que no sea necesaria la tracción en las cuatro ruedas. Llevan el dispositivo «Terrain Response» que permite seleccionar varios programas diferentes en función del tipo de terreno por el que se va a circular. Cada uno de ellos adapta el funcionamiento del motor, la suspensión, la transmisión, el control de estabilidad y el cambio automático.

Además, tienen el sistema «Terrain-i» que gracias a un escáner que hay en el interior de los faros analiza el terreno por el que se transita y avisa al conductor de cualquier obstáculo. También sugiere alternativas y muestra las imágenes captadas por cuatro cámaras, ubicada una en cada esquina del coche, para el conductor tenga un campo de visión de 360 grados en torno al coche.

Estos prototipos llevan otro dispositivo, denominado «Wade Aid» que calcula la profundidad del agua a badear cuando se circula fuera del asfalto. Unos sensores en el paragolpes delantero y los espejos retrovisores exteriores miden la profundidad. La información se muestra en forma de gráfico en la pantalla táctil de la consola. Además, incrementa la altura de la carrocería en caso necesario, cierra las entradas de refrigeración del motor, reduce una marcha para mantener las revoluciones del motor y aconseja la velocidad adecuada en función de la profundidad del agua, con un máximo de 75 centímetros.


Los neumáticos del DC100 y el DC100 Sport tienen un sistema electromecánico en su interior que gracias a una cámara de aire infla unas vainas que empujan unas puntas que se elevan por encima de la superficie del dibujo, quedando fijas para afrontar con mayor seguridad la conducción en nieve o hielo. Equivale a unos neumáticos de clavos.

La denominación DC100 de estos prototipos viene de «Defender Concept 100».