Chrysler Neon (1999) | Un motor bueno y unas prestaciones suficientes
A pesar de no tener un motor muy potente, el Neon 1.6 se desplaza con suficiente agilidad siempre y cuando apuremos la zona alta del cuentavueltas y no esté muy cargado el interior. Sus 116 CV pueden parecer algo escasos con cinco personas a bordo en carreteras con pendientes pronunciadas, en donde habrá que jugar a menudo con la caja de cambios. No será así en zonas llanas.
El motor de origen BMW es muy compacto y tiene la particularidad de tener la tapa de la culata y elcolector de admisión fabricados en un plástico específico. Su funcionamiento es bueno, aunque es un motor ruidoso y algo perezoso en baja. A partir de 4.250 rpm es más brillante y, aunque la potencia máxima la desarrolla a 5.600 rpm, en realidad sube sin desfallecer hasta la zona roja del cuentavueltas (6.500 rpm).
El Neon 1.6 tiene un dispositivo que impide accionar el motor de arranque cuando está en marcha. Otra singularidad es que hay que pisar el pedal de embrague para que el motor arranque, algo habitual entre los coches americanos y algunos japoneses.
La unidad que he conducido tenía pocos kilómetros (menos de 1.000) pero, aún así, se movía con brío cuando apuraba las marchas y estiraba el motor. A medio régimen le cuesta recuperar velocidad en las marchas largas, poco favorecido por unos desarrollos de transmisión que parecen algo largos para un motor de su cilindrada y potencia (34,6 km/h a 1.000 rpm en 5ª). La velocidad máxima anunciada es 185 km/h; no es muy alta comparado con otros modelos de similar potencia y tamaño, en parte motivado por un coeficiente de penetración aerodinámica (Cx 0,34) menos favorable que en otros coches similares.
En aceleración, el Neon 1.6 tiene una buena respuesta si subimos hasta máximo régimen. Chrysler anuncia 10,2 segundos para pasar de 0 a 100 km/h. Comparando los datos facilitados por otros fabricantes, el Neon es de los más rápidos en esta medición.
En consumo también se encuentra en una posición destacable. No tiene el consumo homologado más bajo, pero sí uno de los más contenidos: 9,7 l/100 km en ciudad, 6,0 l/100 km en recorrido extraurbano y 7,3 l/100 km es el consumo medio.