Del 605 aprovecha la plataforma y mantiene su distancia entre ejes: 2,80 m. Como es ya normal en los coches modernos, utiliza chapa de acero de alta resistencia y recientes técnicas de fabricación, como soldadura mediante láser. El capó es el único panel exterior que no esta hecho con acero, sino con aluminio. El tratamiento superficial del bastidor (galvanizado por electrólisis en un 95 por ciento) permite dar una garantía contra la perforación por corrosión de doce años, y de la pintura durante tres.
Funcionalmente las suspensiones son iguales al 605, con McPherson delante y paralelogramo deformable detrás. La versión más potente (V6) tiene un sistema de amortiguación variable, que ajusta la resistencia de los amortiguadores a las condiciones de circulación: suaves si se circula despacio, menos suaves cuando es preciso mejor contacto con el suelo.
Un coche de hace treinta años tenia unas 200 conexiones eléctricas, ahora un 607 tiene unas 1.800. Esto entraña una gran dificultad, que no se puede resolver satisfactoriamente sin el sistema llamado "multiplexado". Consiste en tener una sola línea para distintas señales eléctricas; un código permite distinguir -por ejemplo- la información del termómetro interior para el climatizador, de las señales que mandan los sensores del ABS.