El McLaren Elva es un roadster que pertenece a la gama de modelos Ultimate Series. Su producción está limitada a 149 unidades, que son bastantes menos de las 399 que McLaren tenía inicialmente planeadas cuando, allá por noviembre de 2019, mostró por primera vez el Elva a la sociedad (en abril de 2020 ya hizo una rebaja de las expectativas, reduciendo la producción a 249 unidades; ver la sección Cambios en la información).
Tiene dos asientos y un motor de gasolina de 815 CV. La carrocería carece de techo y ventanillas y se puede pedir con o sin parabrisas. La versión sin parabrisas es la «original» (imagen), en el sentido de que fue la primera que se presentó, en 2019. La versión con parabrisas (imagen) se anuncia un año y medio después, en mayo de 2021, si bien las primeras entregas a clientes no se harán efectivas hasta finales del citado año. Elva es el nombre de un coche de carreras con el que compitió en la década de los años sesenta.
McLaren ha empleado de forma intensiva materiales ligeros en la fabricación del Elva. La carrocería monocasco, los asientos y el chasis son de fibra de carbono (según McLaren, las puertas son las más ligeras que ha creado hasta ahora en un modelo de producción). El motor, de ocho cilindros en uve y 4,0 litros, con sobrealimentación por turbo, proviene del Senna y cuenta con un sistema de escape fabricado en inconel y titanio (dos materiales relativamente comunes en este tipo de componentes para deportivos de muy alto coste).
Este motor produce 815 CV, tiene cigüeñal plano, lubricación por cárter seco y pistones, árboles de levas y empujadores de válvulas ultraligeros. La tracción es a las ruedas traseras y las prestaciones oficiales son una aceleración de 0 a 100 km/h en 2,8 segundos y de 0 a 200 km/h en 6,8 s, cifra prácticamente idéntica a la declarada para el Ferrari SF90 Stradale, que tiene 1001 CV.
En el Elva sin parabrisas el diseño está aerodinámicamente estudiado para que el viento se desvíe por encima de las cabezas de los pasajeros mediante un deflector móvil en el paragolpes delantero, más un vano de canalización central que desvía la corriente a través del capó (sistema Active Air Management System, AAMS). Ambos elementos hacen que el flujo de aire se eleve 150 milímetros por encima de la cabina y que se forme una «burbuja» en el habitáculo. Si lo desean, piloto y copiloto pueden vestir casco, para lo que hay un alojamiento en la parte trasera de los asientos, cubierto con una tapa hecha de fibra, que hace las veces de maletero.
El Elva con parabrisas pesa 20 kilogramos más que el Elva sin él y no tiene el sistema Active Air Management System porque no lo necesita.
En el frontal hay un deflector que se mantiene retraído a velocidad baja y se extiende automáticamente al acelerar, o bien se puede controlar su posición con un botón. Cuando no está extendido, desvía el aire hacia los radiadores de baja temperatura (LTRs, de «Low Temperature Radiators») que hay por detrás de las ruedas delanteras, que ayudan a refrigerar el aire de sobrealimentación y el aceite de la transmisión automática de siete velocidades. Aguas abajo, el aire es canalizado hacia las entradas de aire posteriores, que refrigeran dos radiadores del motor, denominados «de alta temperatura» (HTRs). El fondo plano, el alerón trasero móvil y el difusor posterior contribuyen a que aumente el apoyo hacia el suelo a alta velocidad y a mejorar la capacidad de frenada con la función «Airbrake» (freno aerodinámico).
Entre el equipamiento disponible en la extensa lista de elementos personalizables que ofrece McLaren están unos cinturones de tipo arnés con seis puntos de anclaje. La tapicería puede ser de piel o de una tela denominada «Ultrafabric», hecha de cuatro capas que le confieren resistencia, acolchamiento y una superficie adherente para mejorar la sujeción del cuerpo de los pasajeros. Algunos de los mandos de control que influyen en la dinámica del coche están situados en la cúpula que cubre la instrumentación (imagen), de forma que no es necesario quitar las manos del volante para pulsarlos. La pantalla táctil del sistema multimedia es de ocho pulgadas.
Las llantas pueden ser las de serie, de diez brazos y ultraligeras, o unas opcionales hechas en aleación forjada y con diseño de cinco brazos. Los neumáticos de serie son Pirelli P Zero o, sin coste adicional, Pirelli P Zero Corsa, orientados al uso en circuito. También se puede pedir que la suspensión disponga de una función de elevación para no rozar los bajos en el uso por ciudad. Para la carrocería hay la opción de que se vea el entramado de fibra de carbono, con diferentes tintados para la superficie. Lo mismo ocurre con el interior, con elementos como el suelo, que se puede encargar recubierto de material adherente en algunos puntos o bien tapizado.
El sistema de frenos, «heredado» del Senna, cuenta con discos de tipo carbocerámico con 390 mm de diámetro en el eje delantero y, como novedad, con pinzas fijas fabricadas en titanio. La dirección tiene asistencia electrohidráulica y la suspensión tiene un sistema hidráulico que interconecta los amortiguadores (como el DRC de Audi), que son de dureza regulable en tres posiciones: Comfort, Sport y Track. El control electrónico de estabilidad puede ser configurado en tres niveles de control de derrape (Variable Drift Control, VDC).