El salpicadero y las plazas delanteras del Logan son idénticas a las del Sandero. Nada más entrar al interior, uno tiene la impresión de ir en un coche sencillo y a la vez realizado con un mínimo de cuidado. Todos los plásticos del salpicadero son duros, aunque hay algunas zonas tapizadas con tela que están ligeramente mullidas.
El Dacia Logan 2021 se vende un único nivel de equipamiento denominado Comfort, que tiene entre otras cosas una pantalla táctil central de 8 pulgadas y compatibilidad con Android Auto y Apple CarPlay mediante conexión por cable. La pantalla central (imagen) se alcanza bien desde el asiento del conductor y responde correctamente a las pulsaciones que se hacen con los dedos sobre los iconos. Lo que no hace de forma fluida es gestionar los movimientos de deslizar y «pellizcar» sobre el mapa (en el caso de que esté instalado el navegador, que es una opción). Es una pantalla sencilla acorde con el resto del vehículo. Las principales funciones del sistema de sonido se pueden controlar desde unos mandos situados en la columna de la dirección (imagen), que es similar al que usan algunos modelos de Renault y muy cómodo de utilizar.
Entre la pantalla y el volante existe la posibilidad de colocar un soporte para un teléfono móvil. Junto a ese enganche hay una toma USB (imagen) que vale tanto para cargar el teléfono como de fuente para reproducir música.
La posición al volante es correcta. El volante es regulable en altura y en profundidad y está forrado en piel. Entre los asientos hay dos sitios para guardar objetos. Uno con tapa bajo el resposabrazos central (imagen) y otro abierto (imagen), donde también está el freno de mano eléctrico (imagen). Delante de la palanca de cambios hay otra superficie para depositar cosas menudas. La guantera (imagen) va iluminada aunque no tapizada y tiene un tamaño normal (caben los libros de usuario, los chalecos y alguna cosa más).
La iluminación de las plazas delanteras está bien resuelta con un par de plafones en el techo que también dan luz suficiente para leer un mapa (imagen). En los parasoles hay espejos de cortesía, aunque no van iluminados (imagen).
Los asientos delanteros (imagen) se notan baratos y para mi es lo peor del Logan. Son poco acogedores porque la zona donde apoya la espalda parece absolutamente plana y los apoyos laterales están muy separados entre sí. Eso hace que las personas de complexión normal o delgada sientan que su tronco va algo suelto, lo que resulta molesto en las curvas aun si se conduce a ritmo normal (los asientos del Dacia Jogger recogen mejor la espalda).
El sistema de climatización opcional (que se controla desde unos mandos físicos; imagen) funciona muy bien, pues es capaz de expulsar aire caliente en poco tiempo aun cuando el coche ha estado a la intemperie con temperaturas frías. En condiciones normales, mantiene la temperatura seleccionada en el interior sin hacer mucho ruido. Me parece que es una opción a tener en cuenta.
Las puertas traseras son largas y, como abren en un ángulo grande, despejan un acceso amplio al interior. En las plazas posteriores (imagen) hay mucho sitio para las piernas para el tamaño exterior de la carrocería (y además, se pueden meter los pies bajo los asientos delanteros) y también hay buena cota de altura libre al techo. La peor medida es la anchura entre puertas, por lo que difícilmente entrarán tres ocupantes con un mínimo de comodidad (mediciones propias). En la base de los respaldos de las plazas laterales hay fijaciones Isofix para sillitas infantiles (imagen).
Al igual que en otros coches de precio similar, no hay salidas de aire orientables ni puntos de recarga USB en la prolongación de la consola que viene desde las plazas delanteras; tan solo hay una toma de 12 voltios (imagen). Detrás de los respaldos delanteros hay unas bandejas parecidas a las de los aviones (imagen). En los laterales del techo hay asideros y, en el centro, un punto de luz.
El maletero tiene 532 litros de capacidad, 196 litros más que en el Sandero y 22 litros más que en el Logan anterior. No hay ningún otro turismo con carrocería de tres volúmenes de menos de 4,5 metros de longitud con un maletero mayor que el del Logan. Es ancho en la zona próxima a su tapa y se estrecha mucho en el fondo debido al espacio que ocupan los pasos de rueda. Según nuestras mediciones, tiene unas medidas mínimas de 102 mm de anchura, 75 de profundidad y 57 de altura.
El maletero es lo que más distingue al Logan y, también, es la zona que parece más descuidada de todo el vehículo. La tapa no tiene ningún recubrimiento por su cara interior (imagen) y queda a la vista el mecanismo y el muelle que la mantiene abierta (imagen). Si se abre sin cuidado, la tapa rebota y vibra cuando llega a su tope superior, ya que no tiene ningún dispositivo que frene su movimiento. La boca del maletero es relativamente amplia para tratarse de una berlina de cuatro puertas.
Dentro no hay ganchos para colgar bolsas (sí las hay en un Sandero), aunque sí argollas para fijar objetos pesados al piso. Una de las opciones es un organizador para el interior del gran maletero, que evita el desplazamiento de los objetos cuando no vaya lleno. En el Logan Eco-G no lleva rueda de repuesto ya que el hueco redondo que hay bajo el piso está ocupado por el depósito de gas. En su lugar hay un kit de reparación de pinchazos (imagen).